Un forjado sanitario, cómo indica su nombre, es un forjado que sirve para mejorar la salubridad de una vivienda.
Se llaman «sanitarios» porque tradicionalmente este tipo de forjados eran sinónimo de casas higiénicas, que evitaban la humedad y por lo tanto las enfermedades que esta solía acarrear a los ocupantes de un edificio. (mohos, hongos…)
La finalidad fundamental de un forjado sanitario es la de impedir el paso de humedad desde el terreno hasta el interior de la casa. Esto se consigue creando una pequeña cámara de aire entre el suelo y el primer forjado del edificio. Esta cámara de aire debe estar debidamente ventilada para conseguir que no se acumule humedad dentro de ella.
El forjado sanitario también sirve cómo regulador de la temperatura, aunque no de la misma forma que las cámaras de aire de los muros o cerramientos, pero su existencia ayuda a mantener el calor dentro del edificio.
Tenemos que asegurar que el primer forjado se encuentre separado del terreno, lo suficiente como para que una persona quepa arrastrándose entre la tierra y el forjado para poder garantizar un mínimo mantenimiento.
Los elementos principales del forjado sanitario lo constituyen las viguetas autorresistentes o autoportantes y las bovedillas, que pueden ser cerámicas, de mortero de cemento o de poliestireno expandido, siendo éstas últimas de gran capacidad aislante y de fácil colocación.
Luego se disponen las armaduras de reparto y de negativos, y la capa de hormigón superior.
El forjado y la vigueta deberán cumplir la R.D. 1630/1980 sobre Fabricación y Empleo de Elementos Resistentes para Pisos y Cubiertas y la vigente Instrucción para el Proyecto y Ejecución de Forjados: EF-96.
Por último, en las paredes de bloque, se colocan unas rejillas y así el aire puede circular. No solo tenemos la cámara de aire sino que además, está ventilada. Ejecutar este elemento, aunque encarece ligeramente la construcción, ofrece otras ventajas como son la posibilidad de pasar tubos de instalaciones por debajo. Y si hay alguna fuga de agua a lo largo de la vida del edificio, se accede a ese espacio y se arregla, sin necesidad de tener que levantar las baldosas ni picar
Las Cimentaciones por Losa, también conocidas como Cimentaciones por Placa o Plateas de Fundación, son aquellas Cimentaciones Superficiales que se disponen en plataforma, la cual tiene por objeto transmitir las cargas del edificio al terreno distribuyendo los esfuerzos uniformemente.
Las losas son un tipo de cimentación superficial que tiene muy buen comportamiento en terrenos poco homogéneos que con otro tipo de cimentación podrían sufrir asentamientos diferenciales. También en terrenos con muy poca capacidad portante. Las losas más sencillas son las losas de espesor constante, aunque también existen la losas nervadas que son más gruesas según la dirección de muros o filas de pilares.
Estas losas llevan una armadura principal en la parte superior para contrarrestar la contrapresión del terreno y el empuje del agua subterránea, y una armadura inferior, debajo de las paredes portantes y pilares, para excluir en lo posible la producción de flechas desiguales.
En casos de terrenos de poca resistencia para cimentación (inferior a 1 kg/cm2), puede ocurrir que las zapatas de los pilares aislados tiendan a juntarse.
La cimentación por losa es una buena solución cuando: